A nivel mundial existen muchos casos en los cuales tanto el paciente como su familia exigen a la corte que se les autorice la eutanasia, a algún familiar que se encuentre en un estado critico y no toleran verlo sufrir más.
Para el año de 1976 Karen Quinlan, presentaba un estado vegetativo sobreviviendo por ser intervenida mecánicamente. Luego de cierto tiempo, sus padres solicitaron que fuese desconectada del respirador artificial debido a que no existía ninguna posibilidad de recuperación y en tal caso de que sucediera su estado de vida seria deplorable. Se realizaron diversidades de gestiones hasta con la corte de justicia hasta que por fin lograron la autorización de la desconexión.
La bebé Jane Doe (1983) nació con una espina bífida e hidrocefalia, sus posibilidades de sobrevivir eran muy escasas y en caso de lograrlo su calidad de vida iba a ser desastrosa. Los padres se negaron a que recibiera tratamiento.
Así como estos ejemplos hay muchos que realmente son considerables y entendidos por la sociedad, son situaciones realmente complicadas que solo los que están involucrados en el problema pueden opinar y descubrir lo que se siente pasar por eso. No se debe juzgar sin antes conocer las razones por las cuales se utiliza esa alternativa como salida al conflicto, se trata de una elección racional y personal.
Solo se le daría paso a la extensión de un dolor familiar que no tiene explicación alguna, sin lugar a duda es una posición difícil pero no dejaría de ser humanitaria ya que solo se esta sedando ese dolor y esa agonía innecesaria.
volver a inicio
No hay comentarios:
Publicar un comentario